La Estación es un barrio con pocas casas. Pertenece a los municipios de Berlanga de Duero y de Bayubas de Abajo.
Surgió por cuestiones coyunturales: la necesidad de disponer Berlanga de un apeadero de la línea ferroviaria "Valladolid-Ariza", la cual se inauguró el 1 de enero de 1895, cerrándose al tráfico de viajeros el 31 de Diciembre de 1985, y al de mercancías el 15 de septiembre de 1995. Su estación se encuentra en el punto kilométrico 172,083 de dicha línea.
Leamos a Pedro Pintado Quintana:
"Las vías de sobrepaso miden 450 y 370 metros, mientras que la de muelle mide 204. El gálibo y la báscula están en dicha vía. Completa las instalaciones un depósito de agua que alimenta a dos grúas hidráulicas. Junto al depósito existe una dependencia perteneciente al personal de tracción. En 1951 tuvo una derivación particular hacia una fábrica de derivados de la resina. La vía en cuestión era una curva de 110 metros de radio y salía de la vía de muelle. Las cisternas, en un número máximo de 3, ya que más no cabían, tenían que ser arrastradas por una máquina (no muy grande) hacia la topera de la vía del muelle, para después ser empujadas hacía la fábrica. En 1969 se desmontó la fábrica y la vía.
El 15 de enero de 1985 esta dependencia cambió su categoría de Estación por la de Cargadero. En Abril de 1992 ya noquedaba nada del depósito de agua, (en 1990, si que estaba). El edificio de viajeros tenía las puertas abiertas y, muy probablemente, comience un proceso acelerado de deterioro".
El 15 de enero de 1985 esta dependencia cambió su categoría de Estación por la de Cargadero. En Abril de 1992 ya noquedaba nada del depósito de agua, (en 1990, si que estaba). El edificio de viajeros tenía las puertas abiertas y, muy probablemente, comience un proceso acelerado de deterioro".
Cerca de La Estación, en la zona de Aguilera, se encuentra un puente de hierro salvando el río Duero, en las proximidades del puente Ullán. Puente que fue emplazado por la compañía alemana Seyrig. Y puestos a hablar de puentes, citaremos uno que hay, camino de Hortezuela, que podría ser del siglo XVIII aunque habrá quien opine que es medieval.
PINOS PIONEROS
En este barrio de La Estación hay un pequeñó monte de Pino piñonero tambien llamado pinus pinea, pino doncel, pino real, pino manso, pino bueno. Su floración es en primavera y la recogida de piñas se produce en otoño al tercer año o la primavera del cuarto año tras la floración.
Alcanza los 30 m. y se distingue por tener una copa aparasolada, en forma de sombrilla, poco densa, por lo que es de poca sombra.
Alcanza los 30 m. y se distingue por tener una copa aparasolada, en forma de sombrilla, poco densa, por lo que es de poca sombra.
No tiene poda natural y pueden vivir hasta 400 años, teniendo un crecimiento medio. Aguantan bien la insolación, por el contrario el frio no y se pueden encontrar desde el nivel del mar hasta los 1.000 m.
Su fruto, la piña es de gran valor comercial, ya que los piñones se usan en la confitería y en la preparación de alimentos.
MUSEO DEL CÁNTARO
Prosiguiendo la marcha hacia Berlanga de Duero se encuentra el Museo del Cántaro de Ernesto Martínez (natural de La Estación) y su esposa Montse (nacida en Barcelona).
"Hacia 1982 comenzamos a viajar por los alfares, recogiendo cántaros. Ahora, que quedan muy poquitos alfares, vamos incrementando la colección en las ferias y anticuarios", comenta Ernesto.
Su Museo, el único de estas características de Soria, se compone de unas seiscientas piezas de toda España. Entre ellas destacan unos cántaros de aceite de Córdoba, unos cantaros de bóveda del siglo XVI de Triana y San Lucar de Barrameda, y una pieza de Tajueco que, por sus dimensiones, debió ser para uso colectivo (cuartel militar, convento...) dado que sirvió para guardar mucha comida.
En cuanto a Soria, a parte de esta pieza de Tajueco, tiene ollas y cántaros varios de este pueblo (tan cercano a La Estación, por otra parte, y con alfar todavía en activo). Igualmente han recuperado un cántaro de Ágreda bastante curioso. Tienen también cantarillas de Perico de Deza aunque no cantaros, así como ollas de barro rojo (en Deza lo característico son las piezas blancas). De Quintana Redonda sobresale una pieza que debió servir como medida de vino y que fue realizada por encargo. También hay algunas piezas de Almazán y de Boos.
Y recientemente han puesto en marcha una casa rural aneja al Museo del Cántaro, con dos habitaciones triples y un saloncito. Los suelos de las habitaciones son de baldosas de tejeras, y en el enebro es una madera abundante en esta casa rural.
Texto de Ángel Almazán de Gracia